‘Osos con futuro’, proyecto para la adaptación del oso pardo cantábrico
Esta iniciativa, coordinada por la Fundación Oso Pardo busca la adaptación del oso pardo cantábrico a las consecuencias del cambio climático.
12 March 2021
Oso pardo cantábrico
El proyecto europeo LIFE ‘Osos con futuro‘ facilitará la adaptación del oso pardo cantábrico a las consecuencias del cambio climático y mejorará su disponibilidad de alimento mediante la plantación de hasta 175.000 árboles y arbustos autóctonos.
El programa se desarrollará hasta 2025 cofinanciado por la Dirección General del Medio Natural y Planificación Rural de la Consejería de Desarrollo Rural, Agroganadería y Pesca del Gobierno de Asturias, con el apoyo del programa LIFE de la Unión Europea, de acuerdo con un comunicado facilitado por el MITECO.
Las plantas incluidas en el programa son árboles y arbustos autóctonos productores de frutos carnosos y se distribuirán en 225 pequeños bosquetes que ocuparán 155 hectáreas. A ellos se sumarán 25.000 castaños injertados con variedades autóctonas en otros 75 pequeños bosquetes que ocuparán 55 hectáreas y que, como los anteriores, serán ubicados en localizaciones escogidas.
El trabajo de campo de este proyecto LIFE se llevará a cabo en las áreas de subpoblación de úrsidos de Peña Ubiña, Caldoveiro, Montovo-La Mesa, Fuentes del Narcea, Degaña e Ibias y Somiedo en Asturias, así como en el Alto Sil y Sierra de los Ancares, en León: todos ellos, espacios de la Red Natura 2000.
Según explican los participantes del proyecto para la agencia EFE, “la ciencia advierte de que el cambio climático afectará al oso pardo especialmente en su hibernación”, período que “tenderá a reducirse ante el incremento de las temperaturas”.
Este fenómeno también afecta a “la producción de frutos silvestres de los que se alimenta”, algunos de los cuales, como el arándano, “presentan cosechas irregulares en los últimos años”.
Campaña de información y sensibilización
Está previsto realizar una amplia campaña informativa destinada a “más de 100 asociaciones de cazadores y asociaciones deportivas” ante la perspectiva de la disminución de la hibernación de los osos, ya que un mayor movimiento de úrsidos durante el invierno “puede generar interacciones con la caza y otras actividades recreativas” que se desarrollan en los montes oseros.
Las acciones del proyecto suponen, además, “una oportunidad de promoción del desarrollo rural y de creación de puestos de trabajo vinculados a la conservación de la Naturaleza y la adaptación frente al cambio climático”, con un gran potencial de ser replicados por toda el área de distribución del oso pardo cantábrico.