Reportajes

Ecoturismo para perderse en los mejores laberintos naturales de España

España cuenta con lugares para perderse, el laberinto de Villapresente en Cantabria es el más grande de España mientras que el de Tentegorra en Cartagena es el más largo.

Ya en el penúltimo mes de este 2021 que ha marcado un antes y después en la población debido a la pandemia, la ilusión de las navidades va impregnando poco a poco las calles que empiezan a lucir sus brillos. Noviembre es ese mes que reflexión, de idas y venidas, de quedadas, pero también de huidas. Dicen que en ciertas ocasiones hay que perderse para de verdad encontrarse con uno mismo.  

Por eso, para los Ecoturistas que necesitéis reflexionar, perderos o para los que necesitéis esa última aventura o desafío para terminar el año, desde ecoturismo.com os traemos los mejores laberintos naturales de España para perderse con encanto.  

España cuenta con infinitud de jardines mágicos, pero cuando en uno de ellos encontramos un laberinto esa sensación incrementa y aumenta la adrenalina, y una pregunta ronda nuestra cabeza... ¿encontraré la salida? Todo es proponérselo y a veces perderse es el mejor de los encuentros así que os invitamos a perderos por los secretos de los laberintos de España.  

Laberinto de Villapresente, Cantabria 

Laberinto de Villapresente, Cantabria // Crédito: laberintodevillapresente.es

Si hablamos de laberintos el Laberinto de Villapresente es el más grande de España en la actualidad. Está situado en la localidad de Villapresente, en el municipio de Reocín (Cantabria). Es a día de hoy una de las actividades turísticas más importantes de Cantabria con más de 30000 visitantes cada temporada.  

El laberinto de Villapresente es un entramado de cipreses leylandi "Cupressus leylandii" de 5625m² de superficie. En su interior se puede recorrer algo más de 5km de pasillos. El diseño está inspirado en los laberintos ingleses de los siglos XVIII y XIX. Sin embargo, la pega que tiene es que no abre todo el año. Su temporada se suele iniciar en abril y abarca hasta octubre. Se tarda entre media y una hora en desentrañar sus secretos y la entrada ronda los 4 euros. 


Gran laberinto de Tentegorra, Cartagena, Murcia 

Gran laberinto de Tentegorra, Cartagena, Murcia // Crédito: murciaturitica.es

El laberinto del Parque de Tentegorra, situado en Cartagena, es el laberinto vegetal más largo de España y uno de los más grandes del mundo, al tiempo que se convierte en un nuevo atractivo turístico para la ciudad de Cartagena y para toda la región de Murcia. Este laberinto cuenta con casi cinco kilómetros de recorrido y 5.200 m2 de superficie, este laberinto vegetal tiene el honor de ser el más largo del país. 

El laberinto está compuesto por una variedad de cipreses Leylandi, traídos de viveros del centro de España, de dos metros de alto que impiden la orientación de los visitantes. Es un laberinto interactivo con doce puertas que permiten configurar el recorrido a nuestra voluntad, a lo que se unen los dos itinerarios, uno fácil, y otro más complicado para los amantes del reto.  

El objetivo, además de conseguir salir, es llegar al mirador central desde el que vislumbrar las distintas espirales y el recorrido natural, y descubrir las 12 puertas ocultas con los signos del zodíaco. Lo normal es que la experiencia dure entre 20 minutos y una hora, aunque todo depende de la pericia de cada uno. Y existen salidas de emergencia, por si acaso... La entrada son 3 euros. 

Laberinto del Parque de Horta, Cataluña 

Laberinto del Parque de Horta, Cataluña // Crédito: barcelona.cat

El parque del Laberinto de Horta es un jardín histórico ubicado en el distrito de Horta-Guinardó de Barcelona. Es el jardín más antiguo que se conserva en la ciudad. Se encuentra en la antigua finca de la familia Desvalls, en una ladera de la sierra de Collserola. Iniciado en 1794 y acabado en su primera fase en 1808, fue obra del arquitecto italiano Domenico Bagutti.  

Este espacio cuenta con numerosas obras de arte, principalmente esculturas, así como diversos estanques, cascadas, fuentes y un canal que recorre el recinto superior. El laberinto cuenta con cipreses recortados, así como algunos ambientes de diferentes estilos, desde el neoclásico hasta el romántico. El centro del laberinto está presidido por una estatua de Eros y, una vez recorrido, podrás continuar deleitándote con las variedades de jardines que se extienden en las 9 hectáreas que forman el parque. La entrada al parque es gratuita, pero el acceso al laberinto cuesta 2.23 euros. 

Laberinto del Jardín El Capricho de la Alameda de Osuna, Madrid 

Laberinto del Jardín El Capricho de la Alameda de Osuna, Madrid // Crédito: comunidad.madrid

Este laberinto es uno de los secretos mejor guardados del Parque del Capricho, en la Alameda de Osuna (Madrid). Está formado por laureles y para llegar al centro hay que recorrer casi 400 metros de pasillos. Construido entre 1787 y 1839 para los Duques de Osuna, su principal promotora fue la duquesa, doña María Josefa de la Soledad Alonso Pimentel. El laberinto, concebido para el juego amoroso y los escondites, está hecho con laurel y respeta los planos del que se plantó en vida de la duquesa.  

Su forma actual se debe a la restauración que se acometió en el año 1987 (aunque se cree que fue una de las plantaciones originales de la finca). La pena es que no se puede pasar, hay que conformarse con ver sus encrucijadas desde fuera.  

Los jardines de La Granja de San Ildefonso 

La Granja de San Ildefonso // Crédito: parimonionacional

El Real Sitio situado en Segovia esconde en sus jardines un impresionante laberinto francés de dos hectáreas y media de superficie. Más allá de sus famosas fuentes, merece la pena detenerse en esta impresionante obra vegetal, diseñada en 1713 por Dezallier d'Argenville, con un tamaño de dos campos de fútbol y formado por setos de carpe. Tras años abandonado, se recuperó para disfrute del público en 1993. Aunque se encuentra cerrado temporalmente.  

Casa Tápena en Onil, Alicante 

Casa Tápena en Onil, Alicante // Crédito: alicantenatura

Forma parte del espacio natural homónimo que se encuentra en término municipal de Onil, en la comarca de L'alcoià (Alicante), que cuenta con un área recreativa totalmente equipada y varias zonas visitables que tratan de mostrar los diversos ecosistemas de la región, como la zona agrícola, la zona de jardín y la zona húmeda. El laberinto posee una superficie aproximada de 1.800 metros cuadrados y está formado por setos de cipreses (en el centro hay un cedro). Su entrada es gratuita y no hay limitaciones de aforo ni restricciones por la pandemia, salvo las generales. 

El Laberinto de Casa Tápena esconde una leyenda transformada en un curioso reto que os pondrá a prueba: debéis a llegar al centro del laberinto, tocar el cedro (árbol) con los ojos cerrados y pedir un deseo, y, después, salir de él sin perderos ni hacer trampa. Solo así, ojo, se cumplirá el deseo. 

Hablamos de deseos, de historias amorosas, hablamos de perderse en un pedazo de naturaleza, pero sobre todo hablamos de que practicar ecoturismo nunca ha sido tan fácil como ahora. Disfrutadlo Ecoturistas.