Latinoamérica

La Cuenca del Potiguar, santuario ecológico para aves playeras en Brasil

Los biólogos y ornitólogos monitorean las aves playeras en la Cuenca del Potiguar, lo que incluye hacer seguimiento de su permanencia y patrones de comportamiento.

La Cuenca del Potiguar, en el estado de Río Grande do Norte, al noreste de Brasil, ha sido reconocida como santuario ecológico para aves playeras por la Red Hemisférica de Reservas de Aves Playeras (WHSRN, por sus siglas en inglés) 

Conocida por su belleza natural e impresionantes playas, así como por su atractivo económico por los recursos petroleros que atesora, el reconocimiento de la Cuenca del Potiguar ha sido promovido por el Proyecto Flyways Brazil, apoyado por Iberdrola, a través del Instituto Neoenergia, y desarrollado por SAVE Brasil en las ciudades de Galinhos, Guamaré y Macao. 

En peligro de extinción 

Desde 2015, el Instituto Neoenergia ha participado en el proyecto con acciones de conservación de la biodiversidad en la Costa Branca, región que abarca los tres municipios y en la que las aves limícolas migratorias encuentran el entorno ideal para el descanso reproductivo. 

"Este grupo de animales es uno de los más amenazados de extinción debido al cambio climático, además de ser fundamental para el equilibrio de los ecosistemas costeros", han subrayado desde Iberdrola. 

Según la misma fuente, la ejecución de Flyways Brazil forma parte del pilar de biodiversidad y cambio climático del Instituto Neoenergia (de la filial de Iberdrola en Brasil, Neoenergia) para mitigar los efectos del calentamiento global. 

Entre otras acciones, los biólogos y ornitólogos monitorean las aves playeras en la Costa Branca, lo que incluye hacer seguimiento de su permanencia y patrones de comportamiento. 

"Creemos que este reconocimiento internacional podría influir significativamente en la adopción de nuevas políticas públicas destinadas a proteger a las aves playeras migratorias en Brasil", ha destacado la directora ejecutiva del Instituto Neoenergia, Renata Chagas. 

WHSRN cuenta con más de 446 socios y cubre alrededor de 38,9 millones de hectáreas de hábitats de aves playeras en 121 lugares repartidos en 20 países. 

Su objetivo, proteger y gestionar las áreas para la supervivencia de las aves playeras, mediante esfuerzos de colaboración entre gobiernos, organizaciones no gubernamentales, científicos, empresas, comunidades locales y todos aquellos interesados en la conservación de estas especies.